Con todo el pesar y cansancio el domingo nos levantamos temprano, la tenía que maquillar y si algo hay que hacer bien es el peinado o maquillaje, según ella. Asi que la mamá, es maquillista también, además de chofer.
Y vaya, me senté a verla en el teatro, en medio de tantos papás y mamás que no se saben comportar en un teatro. Esta vez no pelié con nadie, ya no me amargo por una silla, o la falta de silencio, porque se rían o coman, porque critiquen idióticamente un evento. Ojalá que la experiencia con nuestros hijos en escena, nos moldeara un poco los habitos de comportamiento en una sala de teatro, por respeto a los chiquilines bailarines, ellos trabajan mucho por pararse allí, valientes, y mostrarnos de lo que son capaces.
A Ixbá la estan cargando, es la ratoncita en lo alto y es reconocible por lo frentuda. Un gusto verla.
Siempre mi pequeño roedor del corazón...
Comentarios
Me gusta el diseño de las orejas.
saludos
un saludo,