No es que la maternidad me haya regresado a la niñez o a los comportamientos infantiles, pero con los niños hay que estar en sintonía. Cuando mi niña tenía unos tres años, la dejaba en la casa, con una señora que la cuidaba y era además su madrina de bautizo.
Yo le solía llamar para saber cómo se portaba y para variar, una niña hiper activa como la madre, siempre traviesa y puras quejas. La llegué a conocer tanto que podía --a ciencia cierta-- adivinar que hacía, las caras que ponía y las actitudes que tomaba. Un día me di cuenta que esa intuición era inequívoca y la bauticé como mis "súper poderes".
Cuando la llamaba, le decía cosas:
-Hola bebé, ¿como estas?
-biemmmm!
- ¡sacate eso de la boca!
- ¿y como supiste mamí?
-ahhh mis super poderes bebé.
o
- Mire hija, se baña ya! o cuando llegue la castigo!
-y cómo lo sabés?
-ahhh mis super poderes bebé.
Llegue a afinar tanto esto que ella se lo creyó por un par de años. Hasta una vez, que le agarró de ponerme trampas y caí. Entonces le expliqué y ella indignada porque tenía que portarse bien al contar con una madre bruja.
Hoy me llamó al trabajo y me preguntó ¿adivina qué color de camisa ando? y acerté!!!!!!!! Ella dice que en el fondo algún truco hago. Pero no.
Sucede niñita linda que cuando uno ama, uno aprende a percibir al otro, a intuir lo que siente, aún si que las palabras medien.
Algún día te sorprenderás de los super poderes que "otro" te despierte.
Yo le solía llamar para saber cómo se portaba y para variar, una niña hiper activa como la madre, siempre traviesa y puras quejas. La llegué a conocer tanto que podía --a ciencia cierta-- adivinar que hacía, las caras que ponía y las actitudes que tomaba. Un día me di cuenta que esa intuición era inequívoca y la bauticé como mis "súper poderes".
Cuando la llamaba, le decía cosas:
-Hola bebé, ¿como estas?
-biemmmm!
- ¡sacate eso de la boca!
- ¿y como supiste mamí?
-ahhh mis super poderes bebé.
o
- Mire hija, se baña ya! o cuando llegue la castigo!
-y cómo lo sabés?
-ahhh mis super poderes bebé.
Llegue a afinar tanto esto que ella se lo creyó por un par de años. Hasta una vez, que le agarró de ponerme trampas y caí. Entonces le expliqué y ella indignada porque tenía que portarse bien al contar con una madre bruja.
Hoy me llamó al trabajo y me preguntó ¿adivina qué color de camisa ando? y acerté!!!!!!!! Ella dice que en el fondo algún truco hago. Pero no.
Sucede niñita linda que cuando uno ama, uno aprende a percibir al otro, a intuir lo que siente, aún si que las palabras medien.
Algún día te sorprenderás de los super poderes que "otro" te despierte.
Comentarios
Esos super poderes, que con el tiempo se extrañan.
Juan, uno se equivoca sí. Para poder acertar!
Saludos
Ya en serio, me gusta tu blusa celeste !
Y, las madres cuando ya no tienen los super poderes, se les aumenta lo de la intuicion.
Pobre mi madre..jaja..
Saludos y besos mil.
son temerarios!!!