Entonces le compré estas estelas femeninas (mayas), una está pariendo y la otra amamantando.
Estaba ansiosa cuando las entregué, las miró y me dijo que gracias, pero definitivamente yo soy una mamá muy rara. Nos miramos serias y no dio un ataque de risa, me dijo que de verdad estoy loca. Le impresiona la que está pariendo. Y luego ya en serio, le decía como hay en todo un culto a la fertilidad y a la maternidad, danza árabe incluida.
Que bueno que seamos mujeres y nos encontremos con estas estelas.
Comentarios
:-o
Gracias por corregirme Claudia,
lástima que ya no tenga yo acceso a tu blog y aprender de vos,
saludos