
Casi me da un ataque porque debía llegar a mi trabajo y luego ir a la UES. Mi mamá me ayudó y mandó un vehículo con un mecánico. Tomé el vehículo y el mecánico se quedó con el carro para arreglarlo.
En mi trabajo dejé el carro prestado mal parqueado porque sólo haría un par de cosas y debía ir a mi presentación. Mi sorpresa fue que el segundo vehículo ¡NO ARRANCARA! ¿porqué? ¿porqué? ¿porqué? ¿porqué? ¿porqué? ¿porqué? ¿porqué?
pausa.
¿se le puede quedar a alguien dos vehículos el mismo día? ahh y no cualquier día, es el día de mi última presentación!

Les pedí que lo bajaran inmediatamente, le pagué al de la grúa y manejé como loca. llegué al final, a bailar la última coreografía. Entré corriendo pues se ejecutaba la penúltima pieza, seguía el dueto que hago con un compañero.
Mi querido compa, estaba ansioso porque yo no llegaba y cuando me vio me ayudó a cambiarme, peinarme, pintarme y lista! a bailar.
me encantó.....

Creo que con tanta emoción llena de frustración, envejecí. Pero rejuvenecí al bailar y quedar enredada en los brazos de un bailarín con la cabeza hacia el suelo.
Todo lo que debe pasar para merecer un escenario.
Comentarios
Lo bueno es que A la carrera pero al FInal Pudiste hacer lo que tanto te gusta.
hay dias..................
CUdiate .
Saludos
Fiuu,al final pensé que no llegabas pero por un pelito llegaste.
Y el final está clavado.
Anónimo, naaaaa!!!! pues si llegué y bailé y literalmente hice un clavado.
Alde, ¡milagro!---
Yo empezaba con la amargura, total muchas cosas parecidas me pasan y una más era sólo eso.
pero, fijate que esas cosas no deberían pasar y además eso me recuerda que yo no debía bailar. Se trata de compromisos muy serios.
pero eso es otro costal
Saludos Alde,